AL ROJO VIVOJESUS CHAVEZ JIMENEZ
CONTRASTE
La pérdida de confianza en las instituciones por parte de la ciudadanía se debe a los abusos que los servidores públicos cometen en sus desempeños.
Al ver todos los actos de traicion y rapiña al erario brota un hartazgo que provoca el repudio a las instancias gubernamentales que son dirigidas por los atracadores.
Aquí en la entidad no se perdona que desde el gobierno se estén cometiendo atracos como los salarios estratosfericos aunados a los bonos millonarios que están a punto de entregarse.
A nivel nacional se ha puesto el grito en el cielo porque se les paga medio millón de pesos a los diputados federales y los asambleístas.
Las condenas ciudadanas sumadas a los medios no se detienen, ni se limitan. Y contrasta todo esto con nosotros los sudcaliforniano que aquí tenemos legisladores que en el colmo de la desfachatez ganan ese medio millgon de pesos en un solo mes.
Y que en este diciembre se llevarán a los bolsillos más de un millón de pesos. Otro contraste porque se recibe este dinero en un estado donde la estrechez económica de las familias es notable.
En una entidad sufre el padre de familia para allegarse una casita de interés social y de llevar el bocado a sus hijos, pero que sus indignos representantes pueden comprarse una casita de esas con lo que reciben cada mes.
Y además pueden alimentar a su familia con el resto por un año. A nivel nacional no se conocen estos desbordes de abusos de un Congreso que con estos excesos cancela todo tipo de ilusiones de una digna Representacion.
Y no porque un diputado que socarronamente se lleva medio millón de pesos no puede pensar a favor de un Pueblo desprotegido. Y con hambre. Cuidado diputados el pueblo se está cansando.
SABORES
No sé si el gran Lope de Rueda, nos fusilo a los tobeños su cuento de la tierra de Jauja Esa que da cuenta de la tierra de leche y miel. O la palomilla insurgentina, nos estacionamos en el tiempo e hicimos de nuestro querido pueblo, una cofradía al disfrute de sabrosuras y exquisiteces, las que bien, pudieran ser envidia de franceses, alemanes y suizos.
O de otros países destacados en estos menesteres. En la Toba comíamos bien.
Y remontándonos a esa muy añorada prehistoria de antojos tenemos que llegar obligadamente a las melcochas de don Chano Gerardo. Un placer saborearlas.
En el mismo ramo, más tarde destaco en la melcochera historia, don Piserio Talamantes y doña Chayito. Ellos fueron los antecesores del gran don Silvino Jacinto. Un hombre especial. Mago del sabor y de la fantasia que se anidaba en el paladar. Con sus manos elaboraba las recordadas mosquitas, los huesitos, nueces, ummmm, se me hace agua la saliva y se me sube la glucosa, solo de recordar esos dulces de leche inolvidables ¿Los jamoncillos y cortadillos? Caramba, como pasa el tiempo.
Pero aún siento ese placer. Lo mismo que sentimos cuando disfrutamos a la hora del recreo en la primaria Plutarco Elías Calles, el sabor de las naranjas de don José Fonseca, con su clásica expresión “Mucho chile, mucho chile, mucho chile.”
Y ahí como hormiguitas todos formados esperando O nuestra naranja partida a la mitad con chile o nuestra tostada. Eran manjares.
Creo ver a mi hermano Heriberto, riéndose, jugando o compartiéndome, su trofeo, un pedazo de churro, comprado también a don José ¿Y los raspados? Claro que si señores, los mejores raspados del mundo, los de don Genaro. De uva, rico, de vainilla, súper rico.
Este hombre y su carreta que simulaba una casa de ladrillos, era el amigo de todos. Era nuestro confidente, nos aconsejaba bien. Y en algunas ocasiones nos fiaba. Ahora si les voy a ganar una a los de mi generación ¿Se acuerdan de Capulina? Yo sí. Era un hombre gordo que nos vendía chucherías cerca del cine Estrella.
Y aparte nos daba un espectáculo; nos enseñaba su diente de oro. Después nos enteramos que no era tal, sino una cubierta de estaño que se ponía para impresionarnos.
VIDAS PARALELAS
Me sumo a la pena que embarga a la familia Romero Zumaya. En especial a Jorge y su esposa Julia por el sensible deceso de Guillermina Monteverde Avilés. Rogamos al creador por su eterno descanso… Destaca en la atención al público en Sapa La Paz la joven Claudia Ayub. Atiende a los usuarios con calidez y esmero. Felicidades… Y con esto nos despedimos deseándoles lo mejor. Y no olviden: hagan el bien. Y sean felices.