BALCONEANDO
EL POLÉMICO RANCHO
Por Alejandro Barañano
Después de algunos años de andar metido en el oficio del periodismo, veo con agrado como una nueva generación de reporteros vienen haciendo camino, y uno de ellos en especial llama la atención por lo puntual, objetivo y vertical en sus investigaciones.
Me refiero al colega Antonio Cervantes, quien a través de Megacable, Milenio Televisión y el Semanario Zeta ha logrado dar a conocer puntuales señalamientos como el realizado el martes pasado y que tituló: “Hacienda asegura rancho a Narciso Agúndez”.
De acuerdo a lo ofrecido en el reportaje de Antonio Cervantes, en el Diario Oficial de la Federación se divulgó la “puesta a disposición del terreno nacional denominado Santa Anita Fracción 2, ubicado en el municipio de Los Cabos, Estado de Baja California Sur, con una superficie de 680 mil 193.18 metros cuadrados –equivalente a poco más de 68hectáreas- para que sea destinado al servicio de la Secretaría de Turismo, esto por conducto del Fondo Nacional de Fomento al Turismo”.
Ahora bien, de los datos ofrecidos por el joven reportero se desprende además que la solicitud de Narciso Agúndez Montaño para apropiarse del predio, se efectuó el 27 de agosto de 1998 justo a unos meses de convertirse en alcalde de Los Cabos por la alianza que conformaron los partidos de la Revolución Democrática y del Trabajo.
También y de acuerdo a la investigación realizada y publicada en el Zeta, más de siete meses tardaron en llevarse a cabo los estudios tal y como lo fueron la serie de trabajos técnicos de integración, medición, deslinde y validación de campo, donde se comprobó que había una serie de regularidades detectadas en la documentación remitida, y que el predio que se decía ser propiedad de Narciso Agúndez Montaño no era con respecto a lo establecido en el papel, por lo que se detuvo el proceso de enajenación onerosa del bien nacional.
Así que una vez concluido el trabajo realizado por el Departamento Técnico de Resoluciones, Área Técnica de la Dirección General Adjunta de Regularización de la Propiedad Rural, se emitió el dictamen técnico VII-107-B:716578, referente al Predio Santa Anita Fracción 2, resolviendo que cuenta con una superficie de 202.96 hectáreas y que es propiedad nacional. Fin del comunicado.
Aun y con ello, se llevó a cabo la solicitud por parte de la Dirección General Adjunta, al Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales para que emitiera un avalúo del predio en referencia, lo cual ocurrió el 16 de diciembre del año 2010, estableciendo que la propiedad tenía un valor de 202 millones 091 mil 354 pesos; monto que no fue aceptado por ex gobernador sudcaliforniano.
Sin embargo para apropiarse del multimillonario predio, Narciso Agúndez Montaño mediante un escrito con fecha 5 de marzo de 2010 y recibido el 16 de marzo de 2011, presentó la inconformidad al respecto consiguiendo así la suspensión al irse a la Delegación Regional Noroeste del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales; institución que logró invalidar el dictamen.
Con esto fue que quedó claramente demostrado que quién estuvo recluido por espacio de 9 meses en el CERESO de La Paz –asunto que es de todos conocido- movió cielo, mar y tierra, incluso sus bastas influencias en el Ayuntamiento de Los Cabos para apropiarse del polémico predio de Santa Anita, terreno en que a la vista de muchos se han desarrollado diferentes mítines políticos y reuniones familiares fuera de lo estipulado como uso de suelo y que se supone debería ser utilizado en menesteres agrícolas y agropecuarios.
Pero al no poder seguir encubriendo ante la autoridad federal sus pillerías, desistió continuar con el proceso legal para apropiarse del predio Santa Anita o Rancho San Juan, esto en el periodo para que se regularizara y que corrió del 29 de noviembre de 2012 al 29 de mayo de 2013, y donde el fallo para efecto legal del retiro del predio de la propiedad que supuestamente era de Narciso Agúndez Montaño y que se le notificó oficialmente el 9 de marzo recién pasado. ¡Quihubole!
Para concluir, en la investigación del joven reportero Antonio Cervantes, se deja en claro que tanto el Fondo Nacional de Fomento al Turismo como la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano emitieron el resolutivo sobre las 202.96 hectáreas que señala la determinación, y de las cuales 68.01 fueron puestas a disposición de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a través de la Dirección General de Patrimonio Inmobiliario Federal, dependiente del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales; y las otras 134.94 hectáreas quedarán en manos de la SEDATU.
Ahora, y ante todo esto, el tristemente célebre Narciso Agúndez Montaño se rasga las vestiduras de manera pública y dice que todo es mentira y que le demuestren lo que ya demostrado está, y que quien le desmienta su dicho con pruebas fehacientes le regalará el rancho San Juan. Claro, hay que aclarar que el famoso rancho San Juan ya no es propiedad del nativo de Santa Anita, así que ofrecer lo que no es de uno pues no empobrece; por lo que mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .