BALCONEANDO / ¡DELITO ELECTORAL!
Por Alejandro Barañano
Pues nada, con la novedad que a la aspirante a la diputación local por Morena-PT-PVEM-Nueva Alianza, GABRIELA MONTOYA TERRAZAS, fue captada infraganti mediante un video cuando ofrecía dinero, medicamentos y hasta pipas de agua, esto entre otras cosas, a cambio de votos a su favor en las próximas elecciones del 2 de junio.
Según el clip difundido, se puede apreciar claramente como la ABANDERADA POR EL IX DISTRITO habla sin tapujos con quien parece es una de sus operadoras políticas, y a quien le propone abiertamente un apoyo económico a cambio de que le brinde votos. Y aunque la Gaby –como le dicen sus allegados y uno que otro llevado– da a entender que ya le debía un favor la persona cuyo rostro no se aprecia en el video, le afirma que le brindará el recurso para “construir el techo de su casa”, ello claro con el objetivo de que ésta opere a su favor.
Con dicho actuar GABRIELA MONTOYA TERRAZAS cometió –obviamente– un delito en materia electoral, pues existen pruebas documentales donde se le escucha decir: “Yo te voy ayudar con el techo y te lo voy a dar por adelantado para que ahora sí digas…”, pero es interrumpida por la mujer con la que hablaba y le contesta: “No, yo te voy ayudar a eso”.
Entonces GABRIELA MONTOYA TERRAZAS en ese momento le retira la palabra a su interlocutora y vuelve a la cargada: “Porque también te quede pendiente, el tiempo que no te ayude, yo te voy, yo te voy a dar, ya saque la cuenta, son como 8 mil pesos, yo te voy a dar para que tu guardes el dinero, compres el material, lo dejes pagado, lo que tú quieras, y empezamos a trabajar con eso, a la gente ahorita no le ofrezcas materiales, pero a la gente podemos ayudarle con bolsitas –despensas-, pipas, con medicamentos o con otras cosas”.
Pero tal parece que quien ya estuvo cerca de tres años ocupando una curul en el CONGRESO DEL ESTADO –supuestamente haciendo leyes en favor del pueblo– olvidó que el Artículo 7 Fracción VII de la Ley General en Materia de Delitos Electorales establece que se impondrá de cincuenta a cien días de multa y prisión de 6 meses a tres años a quien “solicite votos por paga, promesas de dinero u otra contraprestación o bien mediante violencia o amenazas, presione a otro a asistir a eventos proselitistas o a votar o abstenerse de votar por un candidato, partido político o coalición, durante la campaña electoral, el día de la jornada electoral o en los tres días previos a la misma”.
Y peor aún, cuando la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales prevé hasta la CANCELACIÓN DE LA CANDIDATURA en caso de probarse el delito cometido, esto según lo establece el Artículo 456 Fracción III que a la letra dice: “Perderá el derecho del precandidato infractor a ser registrado o, en su caso, si ya está hecho el registro, con la cancelación del mismo”. ¡QUIHÚBOLE!
Así que mientras GABRIELA MONTOYA TERRAZAS se autodefine como una persona con “actitud de servicio, dinámica, honesta, proactiva, responsable, puntual, organizada, positiva, y con liderazgo”, demostró la verdad que encierra el dicho que tanto pregonaba mi querida Nana: “Dime de que presumes y te diré de que careces”; por lo que mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .
COMO EN BOTICA:
Difícil se las pusieron al candidato a Senador de la República, HOMERO DAVIS CASTRO, pues ya son muchos los que dicen “con Homero sí vamos, pero con Manuelito Cota ni a la esquina“, lo que indica que conformese acerque la fecha de la verdad, o sea el próximo domingo 2 de junio, tendrá que ir soltando al pesado lastre que desde el inicio de su campaña le impusieron. . . ¡NI HABLAR!
El candidato a Diputado Federal por el Distrito I de Baja California Sur por la Coalición “Fuerza y Corazón por México”, ARMANDO MARTINEZ VEGA, reafirmó su compromiso de trabajar por seguir mejorando el sistema de educación pública y así apoyar al magisterio en la importante función que desempeñan.
Además, fue claro al decir que respalda la lucha que hoy en día enfrenta el magisterio sudcaliforniano, donde las autoridades por cierto no han tenido la capacidad para resolver el conflicto ante los compromisos asumidos por ellos mismos. . . ¡HE DICHO!