Todo cambia
Por. Salvador Castro Iglesias
Como dice la canción que cantaba Mercedes Sosa, todo cambia, así pasa en estos días en nuestro País, nuevas ideas, nuevas formas de hacer las cosas, nuevos Gobiernos, en fin, todo cambia.
Es difícil cambiar, adaptarse a nuevas formas de convivencia a las que fuimos obligados primero por la apabullante pandemia por el COVID 19, luego por el nuevo Gobierno Federal que decidió de golpe y porrazo que México merecía dirigirse hacia un Socialismo que aún no termino de entender pero que obligados o no tendremos que soportar hasta que la sociedad en su conjunto decida buscar nuevas formas de ser gobernados.
Nada es ya lo mismo, mientras muchos dicen que todo va de maravilla, otros no dejan de poner el dedo en el renglón advirtiendo que no todo es así, ya que los precios de la llamada canasta básica no dejan de subir, los recortes a los medicamentos en ISSSTE, IMSS y otros se dejan sentir cuando va uno a surtir sus recetas cada mes, el poder adquisitivo de nuestros dineritos cada día alcanza para menos y así, muchas cosas van cambiando.
No menos preocupante es ver como la delincuencia aumenta y al parecer poco o nada se hace para contenerla, nuestras Autoridades nos recetan planes, supuestas acciones, medidas no comprendidas para hacerle frente, y seguimos pagando un alto precio mientras esperamos que éstas se lleven a cabo.
Nuevos días, nuevos Políticos, que con nuevas caras, sonrisas y discursos huecos nos prometen lo mismo que los anteriores pero que en lo hechos y resultados nomás no dan una, pretendiendo que con ello descansaremos y seres muy felices. Y lo que es peor, pretenden que votaremos por ellos una y otra vez.
Casi termina este año 2022, un año de grandes retos no logrados, un tren Maya que no avanza (solo en el su presupuesto inflado cada mes), un Aeropuerto Felipe Ángeles que a duras penas puede mantenerse con muy pocos vuelos y mil inconvenientes, pero no pasa nada, todo va muy bien en este País.
Todo cambia sin lugar a dudas, sin embargo veo y siento que el sentimiento de que muy pocas cosas cambian para bien se deja sentir, en las charlas de café, en los hechos y en las realidades.
Cada día veo más lejano ese México grandioso que soñaron nuestros Padre y que aún hoy en día seguimos soñando para nuestros hijos, ¿Qué pasó?, ¿acaso fue nuestra apatía por dejar que las cosas nada más sucedan porque sí?, ¿fue el hartazgo social por tener que soportar tantos malos Gobiernos que decidimos virar de golpe hacia otros derroteros sin pensar en el gran riesgo de terminar pero que antes?
Sin lugar a dudas México ha sido botín de muchos hombres y mujeres que no aman a México, por personas que han creído que el poder está para servirse y no para servir, y bueno, los resultados están a la vista.
Todo cambia sin lugar a dudas, mi esperanza que un país como el nuestro cada día mas dividido, logre esa unión que tanto nos urge, que el sur y el norte concilien sus diferencias y que se olviden de existen fifís y chairos, entendiendo que todos sin excepción somos Mexicanos, vivimos en un gran País que nos necesita unidos y con todas nuestras habilidades para salir adelante, siempre al frente de nuestros sueños y corazones.
Que cada uno de nosotros siempre demos lo mejor que tenemos para enfrentar los retos que se nos han presentado, poniendo barreras y diciendo no a todo aquello que pueda impedirlo, con trabajo arduo, con honestidad en el quehacer diario, con amor hacia los demás y sobre todo con el pensamiento de que si les va bien a unos nos irá bien a todos.
Nos leemos más adelante …