En la opinión de Alfredo.
1.- ¿En cualquier lugar se puede despachar?
2.- Eran las 10 de la noche.
3.- Una doctora en pedagogía me hacia una pregunta en la escuela superior.
4.- Una buena rola política.
Por: Alfredo González González
Existen cosas que la ciudadanía debe conocer, como conoce otras que no son ciertas u otras que conllevan intereses bastardos. Una noche, a las 22 horas aproximadamente bajo de un automóvil una persona alta, fornida y una calva respetable que se decía era un hombre de elevadas responsabilidades. Bajó en la cochera, se disponía a entrar cuanto antes que lo hiciera deparar unas personas con desesperación en el rostro: – Venimos desde muy lejos, señor.- ¿De dónde?- De punta abre ojos, está en la pacifico norte.- Conozco esos lugares.
El problema era que traían un enfermo delicado y deseaban ingresarlo a una institución médica, no mencionamos su nombre porque no se trata de eso. Sencillamente no había camas. El personaje aquel que en forma discreta dio un paso atrás, tomo un teléfono celular e hizo una llamada a donde tenía que ser. No se escuchó ni un bisbiseo. Volvió sonriente, miro a las personas y les dijo que todo estaba arreglado, vayan internar a su familiar e infórmenme todos los días cuáles su estado de salud. Le agradecieron el gesto y se retiraron.
El maestro Víctor Castro Cosió lo encamino lentamente a la entrada principal, lo esperaba su compañera antes de iniciar el procedimiento para dormir pensaba así lo intuimos en que se preguntaba cuáles serían los problemas del día siguiente.
Sin guardaespaldas, ni vigilancia en su casa, sin unidades blindadas, bueno, eso de por si es mucho.
Aunque no pareciera tener ninguna relación lo que a continuación vamos a describir nuestra maestra de pedagogía comparada alguna vez en la escuela superior me preguntaría que si estoy dando una clase de esas tediosas no por su contenido sino por la hora y los muchachos empiezan a bostezar quiere decir que no hay retención y aprenderán muy poco y que si se presentaba el fenómeno de la lluvia que es lo que procedería. Orondamente le repuse, seguir con la clase y enérgicamente me expreso: ¡No señor!, hacia donde van a voltear los niños en ese momento, seguramente que hacia las ventanas para ver caer la lluvia, le comente sobre el plan de clases y dijo que mandara al diablo el plan y que dirigiera la atención hacia donde la tenían los muchachos, lo que en otras palabras me quiso decir que no había un solo libro donde le decía a los maestros como se debe enseñar un tema.
Se tiene que hacer un plan como a los pasos como lo que llamaban antes, motivación, correlación, atención, abstracción, etc. Seguramente ya cambiaron pero para mí no. En todas las profesiones cada quien le pone el tinte, el sabor. En una ocasión en el ISSSTECALI llegó un compadre mío llamado Ramón Márquez Orozco, el Dr. aplicaba el procedimiento lúdico para destemplar los nervios, parte de la terapia y le dijo el compadre: “fíjese Doctor que anoche tuve una comezón tan aguda en las manos que mi señora tuvo que cepillarme con el que usa para el pelo para poder calmarme”.
Se le quedo viendo el Doctor: “fíjate que a mí también, ¿qué será? Doctor no estoy jugando, pero también puede ser un signo de que vas a ganar la lotería. Es el producto de una alteración de la epidermis. Bueno, pues así es esto, al político puede ser chicharachero, no a mucho público, puede ser bromista, pero también puede ser humanista. Porque es la calidez la que va a curar el primer paso que del enfermo al consultorio. Me hubiera gustado ser médico.
En política sucede lo mismo. No nos lo podemos imaginar cómo mastines, que se olvidan que son pagados con nuestros impuestos. El trato y la gente también psicológicamente ira respondiendo.
No sé si estoy correlacionando porque en política eso se vale y no porque tenga miedo sino porque uno también siente, tiene hijos, esposa, familiares y a nivel de gobernante es mayor responsabilidad porque alivianando la expresión viene siendo el jefe de la casa.
Por eso esto no es ciencia ficción, está basado en una realidad que se dio hace algunas noches lo que significó una experiencia de un servidor: el gobernante es y debe ser el hombre que se acuesta a lo último y va arreglando problemas y se levanta primero.