ECO PENINSULAR
• Ecos de salud en Comondú.
• Ecos de salud en Los Cabos.
• Ecos desde el Congreso del Estado.
• Un libro es un buen amigo.
Alfredo González González.
Hace días en este mismo espacio, dijimos que el gobernante Mendoza Davis había expresado que el poner en servicio una obra es un paso hacia adelante para la entidad. Pocos días después se inaugura el nuevo hospital en Cd. Constitución cabecera del municipio de Comondú. Palabras textuales del secretario de salud, José Ramón Narro Robles, después del acto oficial que: “Tienen a un gobernador que trabaja, que se esfuerza, que se compromete y que cumple. Un gobernador abierto y dispuesto a entender la pluralidad y que trabaja por su gente” (sic). Con estas palabras el secretario de salud dibuja de cuerpo completo al ejecutivo de la entidad quien no solamente usa los vocablos acomodados para salir del paso sino que de dichas palabras pasa a la acción. Los comundeños están de plácemes e invitó a los delegados del ISSSTE y del IMSS. Esto representa como diría Carlos Mendoza, un paso hacia adelante porque tenemos la certeza de que habrá pacientes que requieran de los servicios de la institución de salud en la cabecera municipal y no tenga que trasladarse hacia la capital de la entidad.
Referente a Los Cabos, reinauguró el secretario de salud el hospital general del seguro social. En su momento el Edil cabeño Arturo de la Rosa Escalante, tuvo palabras de agradecimiento para el secretario de salud y personajes del ramo que le acompañaron, así como para el gobernante de la entidad Carlos Mendoza Davis quien como jefe Político de la entidad dio fe de la entrega que hiciera el secretario de salud al municipio de Los Cabos con presencia de Diputados y regidores y demás funcionarios. Pudiera significar para algunos el vocablo reinaugurar es una película de algo ya hecho, sin embargo, los toques finales, instalación de nuevos aparatos y sobre todo valorar en todo su extensión, los alcances que tiene este tipo de obras, quienes participan en esas inquietudes y fundamentalmente la atención a la salud del pueblo cabeño. El viernes anterior fue un día de logros, que de una o varias maneras se logran con la participación de las instancias de gobierno porque efectivamente, unidos somos más y más fuertes en todos los aspectos de la vida Política, social y económica.
Otro evento que se relaciona con el poder legislativo en el Estado fue el parlamento infantil. Buena organización, la vocación de servir de los legisladores y personal de la institución. Al entrar al recinto, tuvimos la oportunidad de apreciar los conceptos vertidos de una vecina sobre la legisladora Norma Peña y se le señala que es una de las diputadas que si contestan el teléfono y tuvieron palabras de afecto para la señora Peña. Norma es gente de pueblo y la volubilidad no es su fuerte.
Cabrá decir también, que este tipo de eventos nacieron gracias a la creatividad de un legislador que perteneció a la legislatura pasada, nos referimos al Dr. Oscar Francisco Martínez Mora, que desde aquellos primeros eventos a la fecha, anualmente han ido mejorando y los educandos participantes han regresado a sus lugares de origen con nuevos afanes, con conocimientos de su congreso, del gobernador, del tribunal superior de justicia, de las bellezas de la ciudad capital de su Estado. Se demostró que la comisión de educación del Congreso. Los padres de familia, los maestros y quienes laboran en el Congreso del Estado, administrativos, legisladores e integrantes de la propia comisión que preside Diana Von Borstel, interactuaron como un equipo que sabe hacer las cosas. Solo faltará que se haga una evaluación a la mitad del camino de esta nueva legislatura infantil y percatarnos si las autoridades de cada localidad los escucharon y los tomaron en serio. Por lo pronto se ha dado otro paso más.
Finalmente diremos a ustedes que un buen libro es un buen amigo porque nos enseña a conocer a los verdaderos amigos. Cuando se habla de racismo, inmediatamente viene a nuestra mente la persona de un maestro rural mexicano que tiene algunos escritos entre ellos “Navidad en las Montañas” cuyo autor es Ignacio Manuel Altamirano, Indio de raza pura y solo por el título nos imaginamos los escenarios donde se desenvolvió este maestro extraordinario. Pero él también nos hace recordar a Juárez que nacido en la sierra mazateca y que aprendió el castellano hasta los 12 años, llegó a ser presidente de la República y no solamente eso, sino que también defendió la soberanía nacional y marca una fase en la historia de México, con las leyes de Reforma. Un buen libro es un buen amigo.