ECO PENINSULAR
• Quemazón que pudo evitarse.
• Los gobernantes deben de ver un cerebro equilibrado.
• En el horizonte coaliciones parciales.
Alfredo González González.
No puedo precisar el año, pero si recuerdo que el presidente municipal de Mulegé era el profesor Marco Antonio Núñez Rosas. A raíz de lo expresado sobre la prevención de incendios en Santa Rosalía y con mayor razón dados el material altamente inflamable usado en la construcción de viviendas, me llegó a la mente lo que me dijo Núñez a raíz de una quemazón: “Mire, conseguí a buen precio unos hidrantes para colocarlos en zonas estratégicas de Cashanía.
Le planteamos la propuesta al Gobernador del Estado que se negó en hacer una inversión de menos de 20 mil pesos para que dichos hidrantes vayan conectados a la red de agua.
Esto ocasionó que hubiera pérdidas más de lo que costaría una obra sencilla. No tuvo la visión para esta y para otras muchas cosas el gobernador de la época, Leonel Cota Montaño.
No ser de otro partido que no fuera el del Nerón de la ambición era un delito que no podía soportar la patología de un hombre digno de un estudio clínico porque habiendo nacido sudcaliforniano, odiaba a los sudcalifornianos.
De lo anterior se deriva que muchos problemas pudieran evitarse si los gobernantes tuvieran un cerebro equitativo, para que, no meterlos en sus filas con camisas de fuerza y hacerlos tan patológicos como ellos.
Su mentalidad no le dio más que para amedrentar vociferando: “¡Te gua a chinga!”. Y no era para menos gozó de las traiciones internas del tricolor, derrotando a Manríquez y de pronto los huaraches se convirtieron en mocasines italianos.
Para regocijo de muchos priistas que deveras no sé qué están haciendo en ese partido todavía.
Ya que de política hablamos según los pregones del centro de la República, el PRI va con el PRD en chihuahua. ¿Cuánto va a durar esta coalición? ¿Hasta que se haga la declaración oficial de la derrota electoral? ¿No hay fuego, bajo sobre la mesa? Si hay rectitud, López Obrador habrá pasado una valla importante.
Pero esto va a estar de pelos, así lo marca la elección venidera. Muchos se interrogan: ¿No acudirán los ganadores con cuchillos y machetes para cobrar agravios? No obstante en el caso de B.C.S los azules llevan un buen trecho recorrido y aquí hay que recordar aquello de: “Gavilán que agarra y suelta no es un buen gavilán”.
Dada a la cantidad de desvíos, trapacerías, dispendios, y enriquecimientos para casas chicas y casas grandes, el tricolor tendría que hacer un esfuerzo jamás visto, porque ahorita el periscopio apunta a sus principales líneas de flotación, porque esto va a ser el reflejo de una Política sucia que se pusieron ante la evidencia nacional por ex gobernantes traidores inclusive no solamente la constitución federal sino al propio presidente de la República.
Eso ha sido la razón y no otra, la cultura Política también se mide por el grado de aceptación de no alcanzar el triunfo pero también llevar con humildad el haber logrado la meta. El poder no es para masacrar ni para robar, ni para producir a sujetos perdonavidas. El poder simple y sencillamente es para servir a la colectividad.
Hora de recordar la baja calificación de Narciso Agúndez Montaño cuando en el congreso del Estado, área que representa la fortaleza popular, cuando los presentes le gritaban que se largara, hizo seña prosaicas que fueron desde doblar el antebrazo para enseñar el bíceps como diciendo que era la fuerza y después la puntita de la corbata haciéndola hacia arriba y hacia abajo, hasta ese momento pensaba que la instrucción sería que le entregara el poder al PRD horas más tarde alguien llegó de México y seguramente le enseñaron algunos documentos.
Hasta donde es posible, y no por su origen humilde o ranchero del que debía estar orgulloso, puede accesar al poder esta clase de individuos que hoy se unen al vértice que hacen las piernas de López Obrador, quien dicho sea de paso está agarrando de chile de sal y manteca.