ECO PENINSULAR
Alfredo González González
Mulegé: líder en explotación pesquera.
Rigo: ofensa a la credibilidad.
Barbosa le da el título de verdugo a Dios.
¿Te acuerdas Narciso? Son fantasmas que te asolan por la noche.
Cuando se habla de mentiras,
|| evocamos el trabajo de Geppetto que creó un simpático muñequito llamado Pinocho en los cuentos de los niños con una naricita sobresaliente. Vino a mi mente también aquel personaje, llamado Cyrano de Bergerac, pero cosa curiosa, también me acordé de Don Narciso AgúndezMontaño.
El miércoles anterior fue el informe del legislador Rigoberto Murillo de quien analizaré después las cosas que dijo como auténtico gestor de la gente de su distrito, pero será después.
Nos encontramos con un personaje que al despegue de la oportunidad que le dieron, mostró el doble discurso. Vamos a ser sinceros, hubimos varios de la prensa por el desafuero en el Congreso y buscamos el apoyo cada quien por nuestro lado. El común denominador de la respuesta de “Rigo”, para sus allegados fue la de que si, que se le seleccionarían a otros compañeros después del 15 de septiembre. Hubo quienes llamaron hasta 15 veces, jamás tuvimos una respuesta. Lo hubiésemos entendido si con toda franqueza nos dice, no puedo, es imposible, alguna respuesta. Lo peor que pueda hacer un político del rango que sea es no alentar esperanzas y no sufrir frustraciones, por fortunas superadas. Sin embargo, esto nos daba una fotografía completa, sobre todo ahora que expresa que le va quedar chica la presidencia municipal de La Paz e inclusive la gubernatura del Estado. Una sugerencia sería, la franqueza que es prima hermana de la verdad. Es la naturaleza humana: el egoísmo o la cobardía.
El político que se niega a dar la cara y ello demerita en mucho porque si no es apto para contestar un teléfono, sí está predispuesto a la cobardía política.
El ingrediente medular del político es la credibilidad y si no hay tal, será difícil que se involucre en el hándicap en la carrera no solamente por la presidencia municipal, sino hasta por la gubernatura. ¡Dios mío, hasta donde hemos llegado!.
Por otro lado, Mulegé vuelve a ocupar nuestra atención, al declarar Felipe Prado que el municipio se ha convertido en líder en la explotación pesquera. Esto representa ingresos por temporadas de captura y fuente de trabajo, gracias al esfuerzo de los pescadores, del ayuntamiento y del gobierno del Estado.
Evocando la inefable figura de Agúndez Montaño y los políticos al poder como Rodimiro Anaya Téllez, quién le vendió la elección. Como no había porra Paceña para organizar la logística de los asistentes foráneos, contrataron camiones urbanos para traer gente de Comondú a la toma de protesta. Al retornar, se mataron en un accidente más de 40 personas. Por ahorrarse un peso, no constataron autobuses exprofeso. Tránsito Federal siguió en silencio.
Recuerdo las palabras del profesor Anselmo Romero Lucero: Sexenio que se inicia con sangre, concluye con sangre. La primera parte del augurio se había cumplido. Después, casi al final su jefe de información muere acribillado a balazos. Posteriormente, justa e injustamente, Narciso sintió lo que es estar privado de su libertad.
Lo inadmisible no es que les hayan levantado un monumento a esas 40 víctimas. Lo que molesta y molestó es que pusieron una leyenda en la parte interior de la construcción: gracias, Narciso, por haber logrado el sueño de tu vida, llegar a ser gobernador de tu tierra, (palabras más, palabras menos)… O sea, que los difuntos daban las gracias porque un gobernador que olvida la seguridad de sus ciudadanos había ocasionado el siniestro.
Cuando una persona me preguntó referente a esto: ¿a quién se le ocurriría hacer una cosa de estas que ofende la memoria de los caídos? Le contesté: pues solamente a un hijo de la chingada.
El versito:
DE LOS JUSTOS ES EL ARMA
ESO ES LO QUE PRECISO
BARBOSA COMO NARCISO
HABRÁN DE ENFRENTAR AL KARMA
NO ES PARA AMEDRENTAR
NO TENEMOS NINGÚN VETO
EN LA SIERRA DE LORETO
(HABRÁ REUNIÓN URGENTE)
COINCIDEN TRES PERSONAJES:
WINCHESTER 73, HALCÓN DEL ATERDECER
Y EL MELÁNCOLICO CIMARRÓN.
