ECO PENINSULAR
• BCS se promueve turísticamente en el extranjero• Siguen apuntamientos en el INSABI• La escalada de precios • Reflexión
Las dos últimas buenas noticias, que se han dado a este pueblo es la intensa promoción que se le da a nuestra entidad referente al turismo extranjero. Lo anterior es mostrar lo que tenemos, paisajes, pesca deportiva, industria restaurantera, buena transportación, los visitantes, a su vez, recibiendo buenos servicios serán los principales promotores de BCS ya identificado como uno de los destinos turísticos de gran impacto.
La otra de las noticias, fue entrega de ambulancias a diversos puntos del Estado, con lo que el gobernante insular está fortaleciendo en medida de sus proporciones el mejorar un importante aspecto cuando se trata de combatir padecimientos que ponen en peligro a la ciudadanía y que deben ser trasladados a la capital del Estado o bien a las cabeceras municipales. Esto es indicativo que no hay un solo día en que no se entreguen estímulos para los sudcalifornianos.
Y por otro lado siguen apuntamientos nada gratos con referencia al llamado INSABI, que por las primeras reacciones de los usuarios, aplican el método comparativo y enfrentan dos realidades: una refiere a que no llena las expectativas y que resulta una llamarada emotiva pero no afectiva. El otro es la respuesta que sigue dando el seguro popular, ya lo dijimos estas apreciaciones tienen su origen en lo que la gente siente, observa la manera en como es atendida.
Lo ideal es la atención universal, pero se necesitan para los proyectos que no tenemos tiempos que vayan a cristalizar en que salen en 15 mil millones de pesos, cuestión que cuando menos requerirán de 3 o 4 años para concluirlos si es que de toda la República se trata.
Se ha hecho costumbre en diversos países el cambiar de nombre a instituciones, que, aunque tengan el mismo fin no sabemos por qué poseyendo infraestructura en buenas condiciones, no se invierte menos y se favorece a los requieren sus servicios. Da la impresión que no quieren dejar vestigio de lo que otros hicieron y que si hubo administrativamente en el centro de la República arrebatingas y corruptelas no es culpa de aquellos seres humanos que por el solo hecho de nacer tienen derecho a la salud.
En otro tema, entre inquietud y broma la ciudadanía nos dice “no sabemos si los billetes se nos encojen o los precios se están elevando”, dándole el justo calificativo en enero como el mes de las cuestas.
Sabemos que hay productos que no están bajo el control de la dependencia indicada, porque tengo entendido que esta al gusto del consumidor, pero hay comercios del sur de la ciudad que anuncian las llamas especiales y los consumidores se encuentran que no hay tal, porque sus precios aparecen en el lugar del consumo en tres veces más. Hay amas de casa que ya para el concluir la semana lectiva quizá el sábado ya no haya huevos que freír, leche que consumir, etc, entonces aquí es donde se encojen los sueldos, y algunos comerciantes, salvo las honrosas excepciones desde que se enteran que van a ver aumento de precios sobre todo en artículos de consumo humano, todo aquello que no tiene riesgos perecederos almacenan para después hacer su agosto en enero. Aquí es donde se debe pedir la solidaridad con el público consumidor. Luego nos dejan las alternativas de trasladarnos en un vehículo o hacer nuestros alimentos. Iluminarnos con velas o pagar el consumo de la energía eléctrica. Nada tuviera que ver si no fuera verano pero no es así. Lo dramático de todo esto es que se está rifando un avión, causó una hilaridad colectiva aunque lo hubiera dicho de chunga el presidente poder vender los boletos en 500 pesos. Con el puro mantenimiento dejan en ropa interior a quien aspire a tener un bien de esos.
Hay daños colaterales que empezaron a emerger. Hace unos días se conoció la noticia que estaban detectando en escuela de educación superior la negación completa de la ética profesional y se trata específicamente del acoso sexual de catedráticos varones que acosan a jóvenes estudiantes. Si precisamente para que haya un cambio determinante en esta nación se requiere de la producción de valores y no buscando placeres sensoriales que en este caso quien guía profesionalmente a los muchachos, no pueden ser un digno ejemplo para los dignos profesionistas del futuro.