ECO PENINSULAR
• Los héroes también deben ser vistos como humanos. • El semidiós tuvo su talón. • La grandeza de Cárdenas le dio su lugar en la historia. • ¿No somos parte del Pacto de la Unión? Pregunta.
Alfredo González González.
Los héroes tienen su perfil humano. La historia los ha camuflageado para parecer perfectos. Ovaciones, aplausos y mentiras decoradas, a los hombres los mares, refiriéndonos a la figura del drama nacional que se puede valer hasta de la mentira y la falacia en aras del poder.
Cuando la madre de Aquiles, hijo de un Dios y una mujer terrenal, le sumergió en la laguna estigia para volverlo casi invencible, nada más que el talón donde lo tomó para sumergirlo, no alcanzó esa inmunidad. El mensaje de Homero cuando habla del sitio de Troya es que todos los seres humanos y algunos que los hacemos casi dioses tienen un punto débil, que tanto en política como en medicina se llama talón de Aquiles.
Nadie escapa a la regla por la ley de caracteres individuales. Vea usted: Unos somos flacos o gordos, inteligentes o lentos, analizan o se van por la vía corta, honestos, y deshonestos, etc.
El poder embriaga y se pierden las dimensiones de las cosas y piensan: Sin mí, el desastre. Y la verdad es que como dice el verbo popular: no falta el que se va, ni sobra el que se queda. Desgraciadamente piensan que son indispensables y que sin ellos, el desastre.
Así en el transcurrir del tiempo, hay quienes piensan que son indispensables. Pero como se dice coloquialmente, no falta el que se va ni sobra el que se queda. Decía el león inglés Winston Churchill cuando debatía con sus oponentes las cuestiones políticas de la gran isla: Mis enemigos políticos cada momento se están yendo de bruces y se levantan como si no hubiera pasado nada.
La grandeza de Cárdenas del Río lo introdujo al lugar que le concedió la historia. Fue el despegue y la encarnación de la Revolución mexicana. Pero fue un ser humano. Cuando murió el general Mújica, estaban distanciados aunque hubo un encuentro en el hecho de Mújica Velásquez. A la hora de la oración fúnebre el originario de Jiquilpan, se quedó corto porque algunos biógrafos dicen que era más pieza el de Tingüindín, Michoacán y hubo abucheos y rechiflas para el hombre que fue la grandeza de México. Pero el tata hizo mucho bien y ya está juzgado por la historia.
Hemos ido transitando con tropiezos o incidentes de injusticias de mentiras y expresiones heroicas, pintos y colorados. Es hora que enderecemos todos los caminos. Una justicia social integral, una fuerza de trabajo produciendo con el mar, con la tierra, pero enfrentando la certeza de que hay apoyos, educación y sobre todo crear el blindaje para una nueva generación, con muy elevados valores y la sabiduría que la política es el hecho de servir a la colectividad. Pero además que haya equidad en la distribución del ingreso del producto nacional bruto. Más clara mente repartir con las singularidades de cada región una forma no abusiva de lo que se recauda anualmente por muchos conceptos observados en la ley federal.
En estas condiciones son los de adentro los que han venido abusando a través de los años. Hoy el Tlatoani mexicano, enfrenta 3 aspectos muy delicados: El desempleo, la pandemia que no es nada más en México y una economía desbaratada.
Padecemos contar miles,
Héroes que son humanos,
olvidamos el eslabón de hermanos,
Por este talón de Aquiles.