ECO PENINSULAR
Tengan dignidad señores diputados ya hubo un resolutivo.
Desde el principio tomaron el camino equivocado.
C.M.D. convoco a la obediencia a la Justicia Federal.
Alfonso hombre recto, integro. Nuestro shanatito se fue.
Ni la resolución de la justicia federal ha logrado que los moralmente acabados en su carrera política, fueran hechos a un lado por sus proyectos perversos.
Se la llevaron todo el tiempo cuando creían tener a Dios tomado de los cabellos, armando relajos con efectos de escándalo. El rebote será mayor cuando los cabeños se enteren que desde las últimas actitudes definidas por las caricaturas de diputados pudieran retrasar la construcción de la desaladora.
Es lamentable que gente preparada como la Ing. Milena Quiroga Romero se haya reclutado con pelafustanes de la talla de Esteban Ojeda, Ramiro Ruiz, Marcelo Armenta, Humberto Arce, claro está con sus honrosas excepciones. ¿El objetivo? Poner fuera de equilibrio la vida institucional de la entidad.
Desde el inicio de la sesiones correspondientes empezaron a enseñar las uñas y dientes. Lastimosamente una mayoría, la presidencial, logro que circunstaran gente sin escrúpulos, sin ideales, y dieron forma a un analfabetismo parlamentario.
Salvo un acto de conducta que trato con la institución llevada a cabo por un ex gobernador, se había visto la imprudencia, y la estupidez en actos de supremo primitivismo en un escenario donde en sus muros esta incrustado los nombres de personas y procesos que forman parte de la historia política y social de nuestro estado. ¿Qué estaría pensando Esteban Ojeda cuando expreso que esta era la mejor legislatura que había tenido u había sido parte de los poderes?
Una y otra vez el titular del ejecutivo los ha convocado a que acaten lo dispuesto por la justicia federal. No han hecho caso. Estaremos de acuerdo que, como dice la expresión: es de humanos errar pero es de necios permanecer en el error. Y estos ya se pasaron del error, se encuentran inmersos hasta las cejas por las ambiciones de riqueza y de poder.
Y la infausta noticia de anteayer por la mañana la recibí de Guillermo Mercado Romero: el ingeniero Alfonso González Ojeda había muerto. Honesto, Vertical, Ya había perdido a Bety su esposa y a uno de sus hijos en un accidente y hoy la entidad le recuerda que fue el hombre que reinicio la restauración de la vida municipal y había sido cercenado en los años cuarenta, dándole forma a la vida edilicia para dar nacimiento al H. Ayuntamiento de La Paz.
¿Te acuerdas Alfonso?: hace aproximadamente 73 años que estudiamos la primaria en la incorporada 20 de noviembre. ¿Lo recuerdas?: nuestro apreciable cutino Gilberto Salgado Ríos, Félix Pozo Méndez, Arturo Sotelo Salgado, Arturo Sala Sánchez, Rubén Gastelum y varios que escapan ya de mi cansada memoria.
Luego el reencuentro en la secundaria José María Morelos Y Pavón, con Antonio Carrillo Huacuja, José Antonio Flores, José Luis González Sánchez, y Fidel Castillo Avilés. Nos ubicaron en el primer año “c”.
Alfonso González Ojeda fue un buen hombre y un ejecutivo ejemplar. Fue ejemplo de rectitud, que hay algunos por ahí que deberían de tomar ejemplo del gran ausente.
Tu condición y dignidad humana, Alfonso, te hacen hasta el final de los tiempos un hombre de los llamados a recordarse siempre. Anda, ve con Dios, que ya te está esperando con los que se te adelantaron.
Arrionazo: para los que no han acatado la justicia federal.
Estaba ubicando un monten
El miedo no resististe
Fraile Mostén tú lo quisiste
Fraile Mostén tú te lo ten
Costo cara la temeridad
Lo saben los sin vergüenzas – Traficando facturas familiares-
Perdieron la dignidad.