ECO PENINSULAR
1.- Dieciséis días para navidad.
2.- Casi por concluir un año más.
3.- Ahora será diferente sobre las reuniones familiares por la inconveniencia de sumar muchos invitados a los tamales.
4.- Es también momento de conservar las medidas preventivas de la contingencia.
Cansado y agobiado se va el otoño. Dentro de dieciséis días aproximadamente habrá llegado el invierno y aunque en muchos casos no existe la condición para reunirse todos y la economía esta quebrantada, siempre habrá la manera de hacer un modesto brindis.
Sin embargo son los días en que las gentes parecen cambiar, casi en su mayoría son afables, lo poco que puedan tener lo comparten con gusto: unas galletas, algún pay hecha por manos de una chef, pero sobre todo lo importante es que le pedimos al redentor, salud para todos y tranquilidad en nuestros hogares.
Es como si la última hoja del calendario se pintara de blanco, es el único color adecuado para la fecha. Se estiran los presupuestos para comprar una camisa o un pantalón o sencillamente para dejarlo en años entrantes si Dios nos lo permite.
Sin embargo quedan los alientos ácidos por que en lugar de proporcionar a los mexicanos una esperanza para el próximo año, el mensaje que nos envía la federación son los tijerazos al presupuesto del 2021.
Hemos vivido confinados en prolongadas fechas pero la llegada simbólica de Jesús de Nazaret anida esa esperanza que no debemos perder.
Dentro de 23 días se inicia el conteo regresivo y llegara el 2021 si logramos pasar el meridiano debemos dar gracias a Dios y como dijo el bohemio: “brindaremos por que el año que comienza no sea un cumulo de amargos desconsuelos”. Seguramente también para trazar nuevas acciones, pues si estamos de pie, será suficiente para luchar por la sobrevivencia de las familias.
La influencia ejercida por el medio geográfico entre quienes nacimos o vinieron a quedarse para hacer una nueva familia de sudcalifornianos, hizo enfrentar a nuestros abuelos para vencer las adversidades que a veces nos pareciera una cosa imposible. Pero esas desesperanzas que nos da la vida por lo que fuere también ha templado nuestro temperamento y habremos de seguir adelante. En lo personal tal vez pudiera pensar en un escritorio público o en algo que me sienta hacerme útil y no una carga para mi familia, pero jamás hacer lo que están haciendo los ampones que son los nuevos inquilinos del poder que quieren hacer caer de rodillas a un pueblo que no debe retrasar su destino. El nacimiento de Jesús en un humilde pesebre de Belén sigue siendo una estruendosa bofetada a todo lo que signifique la ofensa a la desgracia. Predestinado su solo nacimiento hizo que viajaran muchos kilómetros tres Reyes poderosos para adorarlo y darle el título de Rey de Reyes.
Atrás se quedó Noviembre
Cayó del calendario la hoja
La libertad no admite rejas
Y ojala tranquilo se vaya Diciembre.
No hay que olvidar el tema
Con fe debemos caminar
Un himno debemos cantar
Al nacer del redentor.
Reflexión: Que la estrella de Belén ilumine la navidad y que la llegada del nuevo año traiga bendición a ti y a tus seres queridos y amigos.
Ultima hora: un grupo de jóvenes que militan en Movimiento Ciudadano que se dedican al negocio de alimentos hace unos días estuvieron en Querétaro promoviendo la cocina sudcaliforniana. Encabezados por el dirigente de la agrupación estamos enterados por Héctor Palacios Estrada si se configura el frente opositor, estarían dispuestos a sumar esfuerzos.
Jóvenes con entusiasmo que están haciendo una forma diferente del quehacer político.
Si movimiento ciudadano frena como una agrupación que toma fuerza, PAN, PRI, Humanista y PRD podrán enseñar las herramientas de trabajo. Que así sea.