- Dos sexenatos y un cuatrienio.
- Escuela de cuadros, quizá sea uno de los caminos.
- La rotonda de los malditos.
- Toño: ¿Y los tres millones?
Alfredo González González.
Se ha dicho que todas las comparaciones son odiosas. Sin embargo se hace conveniente establecer las diferencias de dos sexenatos de inercia y de abusos, donde la rapiña y la presencia de trepadores de nacionalidad desconocida fueron cobijadas por dos sujetos señores de horca y cuchilla que germinó en el sur del Estado y el cuatrienio que está por terminar. Hace 4 años y medio, Marcos Covarrubias inició un caminar febril hacia los 4 puntos de la rosa crítica de la entidad. Hoy, diversos medios de comunicación indicaron el oxígeno que guardó para el sprint final al ir entregando obras de beneficio social.
Lo hemos dicho, ni Baja California Sur es el Estado perfecto de Platón, ni Marcos en el hombre perfecto, pero existe una enorme diferencia entre las pillerías del pasado leonelista y Narciso así como recientemente de Toño Agúndez que cerraron sus periodos entre el abuso de poder y los dispendios.
En otro tema, en México, ciudad, en muchas entidades existen rotondas. En el Distrito Federal está la de los hombres ilustres. Salvador Díaz Mirón, poeta, escritor, defensor del honor de la mujer llegó a batirse en duelo por damas y también llegó a ser el director del periódico El Imparcial durante la época del usurpador victoriano Huerta quien lo había nombrado director. El chacal hizo una visita a los talleres. Al día siguiente apareció una nota que decía: “El día de ayer visito nuestras instalaciones el presidente Victoriano Huerta”. El sumario remataba: “Cuando se retiró dejó un perfume de gloria”.
Lo anterior le valió al veracruzano a que no accesara al lugar de honor.
La pregunta de este lunes es para don Antonio Agúndez Montaño: ¿Y los tres millones de pesos que se extraviaron en el Ayuntamiento cabeño? ¿Es posible que con tal recaudación no haya dispuesto de un depósito bancario por los riesgos que se corren de dicha cantidad, durmiendo 3 noches en una caja fuerte que en una primera supervisión no daba señas de violencia?
Fíjese lector que los virreyes sureños no difieren mucho de los saqueadores de la época de la colonia. ¿Será que la genética de los ladrones no tiene margen de error? La frase de este lunes: Leonel fue el padre, Narciso fue el hijo y el Toño el espíritu santo. Buenos prospectos para una rotonda gris de los lamidos y abusivos.
La noticia que corrió como reguero de pólvora el domingo anterior fue la segunda evasión del Chapo Guzmán del llamado penal de alta seguridad. No resulta incierto el hecho de que en esos lugares priva la deslealtad y la falta de respeto a las instituciones porque generalmente la metralla va contra los altos círculos Políticos, que si bien cierto representan los altos rangos de la cosa pública, también de alguna forma se debe señalar que en esos lugares hay coordinadores de la seguridad interna y externa y para una fuga de ese calibre desde luego que no fue obra del evadido únicamente sino que tuvo ayuda del exterior, lo que es grave, pero más grave aun los que se suponen que están vigilantes centímetro a centímetro en un lugar donde se encuentran los internos de mayor peligrosidad para la tranquilidad de la sociedad mexicana. Una vez más, se demuestra que los perfiles del recurso humano deben expulgarse palmo a palmo, aplicar exámenes psicológicos cada determinado tiempo. A examinar los ingresos económicos de quienes tienen la responsabilidad inmediata de salvaguardar los intereses de la sociedad y repetimos, aun cuando la complicidad que de alguna forma existe del exterior también hay responsabilidades oficiales porque la estructura física del penal no admite o no debe admitir las presencias extrañas del exterior del centro.
