En la opinión de Alfredo
1.-De mayoría a minoría
2.- La modestia es humildad. La soberbia es vanidad.
3.- Cifras sobre la pandemia.
4.- En la humildad radica la grandeza.
Por: Alfredo González González
Muy pronto aquellos que no acataron las reglas de su maestro AMLO no observaron aquello de: no mentiras, no robaras, no traicionaras.
Hicieron caso omiso a unos principios que el después también los soslayo, nos referimos al líder de la 4T, aunque siguiendo la huella del tlatoani Mexicano en varias ocasiones miente, y en otras se saquean a través de un subejercicio aparentemente legal, los recursos destinados a la salud pública que la federación debe aportar para salvaguardar la vida de los compatriotas.
Los diputados morenistas locales no fueron para elevar la voz y exigir seriedad en cuestiones de vida o muerte, independientemente de la rapiña “legalizada” por quienes vinieron a mazar cuantiosas fortunas en tres años.
Hoy se ausentan y creo será difícil volverlos a ver en una curul porque sencillamente hubo gente que no hizo nada y llegó a ganar hasta 300 mil pesos mensuales. Otros creyéndose con fuero hicieron escarnio del gran mérito de la sudcalifornidad y otros más disfrutaron de facturas familiares.
Por lo que se ve desde la óptica del poder legislativo local es bien poco lo que pueden hacer los morenos. Aunque se ha hecho referencia del dominio público que un senador de la republica hoy candidato a la gubernatura del estado va a ser objeto de un homenaje en la parte sur de la península por su participación en las cuestiones de la pandemia.
Si así lo definieron bajo un análisis concienzudo y con la aprobación de las nomenclaturas, seria responsabilidad municipal. Si fue por causas de abrirle un blanco a Víctor Manuel Castro Cosió nadie mejor para el que un hombre para resurgir no necesita de este tipo de homenajes, y es muy posible concediendo el beneficio de la duda que no se haya promovido por el propio interesado pero si es así se pondera su participación en las panaceas para ir determinando la pandemia, entonces esta en aprietos.
Las cifras del INEGI nos dieron un promedio de 2 mil infectados en los que van varios fallecidos, en el país la cifra oficial es 256,200 y mucho tememos en la realidad que podría llegar a ser de 600 mil.
Entonces nos encontramos que el subejercicio del 68% en el ramo de salud también coadyuvo al fallecimiento de gente que pudo haberse salvado pero ante la nula del gobierno federal venció la pandemia y esa sería otra de las respuestas que nos debe el gobierno de la república, porque no se tomaron medidas previsoras.
Entonces por el lado de la pandemia no se justificaría, pero repetimos, puede ser que sean buscapiés.
De cualquier forma menos abre el camino para un análisis de dos personas: una de ella un guerrillero de la punta de los cabellos a los pies, el General Emiliano Zapata Salazar, que solía decir: “yo no quiero honores. Lo que quiero es que se reparta la tierra entre los campesinos. Esa es mi misión”. Esa expresión lo engrandece más. También recordamos que el maestro Domingo Carballo Félix por sus elevados méritos fue elevado a la categoría de maestro de maestros y en sus palabras de gratitud dijo textualmente: “No creo haber hecho tanto para merecer tanto”.
Lo anterior situó a don Domingo en la clasificación de la humildad, de la modestia, porque esos son los atributos que engrandecen a los hombres y fue por siempre el arquetipo de ese semillero de maestros normalistas que han construido ese estado y este país hoy subestimados por un gobierno que hace lo que le viene en gana.
La frase de este martes: “Nada sienta tan bien en la frente del vencedor como una corona de modestia”.
(Juan Donoso Cortés)