EQUILIBRIOS / BASURA Y VIOLENCIA
Por: José Luis Puga Lizardi
Pirotecnia Política: No todo lo que se puede contar cuenta y no todo lo que cuenta se puede contar. (Albert Einstein)
No se entendería la violencia digital contra la Diputada GABRIELA MONTOYA TERRAZAS, si detrás de desempolvar una iniciativa de ley sobre el manejo de residuos sólidos y que ahora pretenden sea aprobada por la actual legislatura, no existieran millonarios intereses económicos que se generan por servicios y negocios de carácter privados relacionados con la basura doméstica e industrial, sobre todo en los municipios de La Paz y Los Cabos.
Como la iniciativa no se ha socializado, son pocos los datos concretos que se han hecho públicos por los interesados en el tema; la atención pública y mediática se está focalizando sobre el manejo de la basura y toda la economía que se genera en torno a la recolección, transportación y reciclaje, que en parte realizan los Ayuntamientos de Baja California Sur y además por empresas privadas que atienden las demandas en este sentido, cuyos costos se contabilizan en cientos de millones de pesos al año.
Se supone que la iniciativa que está promoviendo GABRIELA MONTOYA, integrante de la fracción del Partido del Trabajo en el Congreso Local, pretende darle un ordenamiento de avanzada al tema del manejo de la basura y otros igual de importantes pero sobre los que no se profundiza por desconocimiento o porque los primeros interesados en la materia fueron sorprendidos por la intención de ahora sí, transformar la iniciativa – ¿quién sabe de quién? – en Ley.
En un principio la legisladora petista, reconoció ante los medios de comunicación, que no descartaba que la campaña anónima contra ella y la iniciativa, fuera producto de integrantes del Partido del Trabajo o del Movimiento de Regeneración Nacional, ya que acentuó que posiblemente se tratase de “fuego amigo” e incluso de otra legisladora de nombre MARBELLA GONZÁLEZ, quien emitió un comunicado contra esta pretensión y argumentó que la estaba revisando a “detalle”.
En este sentido, la hipótesis de quien esto escribe, es de que esa versión es la menos probable y aunque no tengo pruebas -pero tampoco dudas- me atrevo a plantear que la campaña de “desprestigio” y la pretendida descontextualización del tema, tenga su origen en los millonarios intereses que serían pisoteados con la entrada en vigor de una ley que ahora debe cumplir su proceso para ser aprobada o rechazada por el pleno del Congreso del Estado.
Es obvio que detrás de la campaña “negra” contra la legisladora GABRIELA MONTOYA, están quienes directamente se benefician del vacío provocado por la inexistencia de una ley que regule las actividades millonarias relacionadas con la basura que se genera en Baja California Sur y sobre todo, el tema del reciclaje.
Si la Diputada MONTOYA, conjuntamente con quienes dicen apoyarla moral y políticamente, emprenden acciones legales y demuestran que quien está financiando esta campaña –también- contra la LEY que se promueve, incurre en “violencia política en razón de género” deberán llegar hasta las últimas consecuencias y desenmascarar a quienes desde el anonimato pretenden ejercer presión, utilizando maquiavélicamente a los pepenadores de los rellenos sanitarios y basureros; sí nada de lo anterior sucede, todo quedará en un mero circo mediático y se cumplirá la máxima aquella que dice, “todos lloran pero no por los mismos motivos”. Ya veremos.
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