Gracias a Dios hoy cumplo 80 años.
Tres cosas me enorgullecen: mi familia, ser maestro y aprendiz de periodista
Vidas paralelas: López de Santa Ana y López Obrador
Un consejo post morten de Mendoza Arámburo.
Muy temprano el día de hoy, di gracias a Dios por haberme permitido llegar a los 80 años, les encomendé a mis amigos y hasta a mis adversarios que también necesitan de ti. Gracias por la salud porque cada vez que me he caído has estado presente para tenderme tu mano. Gracias a mi esposa Sara Alicia, a mis 6 hijos, 11 nietos 4 biznietos y dos en gestación. Gracias este cielo y a esta tierra que me vio nacer.
Mi pintimo orgullo es mi familia y mis auténticos amigos, el haber concluido la carrera magisteral en la que laborado por más de 50 años y el orgullo de haber regresado a mi normal urbana a compartir la cátedra avalada por una institución de educación superior.
Cuantas anécdotas se sucedieron en las aulas de la normal urbana. Hay una en especial que habla de la nobleza del educando y del educador. Resulta que un compañero lelgaba sumamentet reardado a la clase de educación musical, casi a 10 minutos de concluir la clase, se escuchó un grito ¡retardo!, el maestro Pelaez Manríquez, ya enfadado le dijo: ¡ que retardo ni que la chingada!.
La respuesta del alumno fue: ¡ande que, viejo pinchi! Entonces, el profesor Pelaes le dijo: Mira, siéntate, tienes asistencia. Muletos más mostrencos he amansado. Pasaron los meses y llegó el término del curso y aquel muchacho que había tenido la fricción con su maestro, le dedicó su tesis profesioinal, ya que el mentor, recién suscitado el problema, le obsequió una guitarra porque era uno de los pocos que carecían de este instrumento. Un acto de recíproca nobleza.
A través de tiempo he analizado lo llamado vidas paralelas y un día leí algo sobre la trayectoria de Antonio López de Santa Ana. Un día mando llamar a sus tesoreros y le requirió de fondos, la respuesta es que no había en las arcas. Pues aplique otro impuesto. Recuerde el señor que el último que impusimos, el pueblo se alebrestó pues tiene que buscar una solución, el tesorero le dijo burlonamenrte, solamente que cobremos por respirar… ¡Ándale!, por cada puerta un real, y por cadad ventana, medio real. El tesorero se quedó helado mientras Santa Ana le decía. Este país en 17 años de vida independiente, me ha nombrado 13 veces presidente, de modo que no tengas pendiente. Un autócrata, haciendo antesala a la dictadura.
Recuerdo que en el transcurso de estos años, durante el periodo de 1975-1981, una tarde de vísperas de Navidad, me invitó a su despacho domiciliario el Lic. Ängel César Mendoza Arámburo. Con la confianza que teníamos, le dije en la privacía: que se siente ir ya a a mitad del camino para concluir tu mandato?. La respuesta no se hizo esperar: mira Alfredo siempe quise llegar a ser gobernador, si lo he hecho bien o mal, la historia tndrá que juzgarme, pero desde que avanzaba en el camino, me preparé más para dejar el cargo que para asumirlo.
Palabras de un político cuajado, que como siempre lo he dicho, gobernó como lo expresa el aforismo latino: suavidad en la forma y firmeza en el fondo y también como dice el verso: firmeza y luz, luz y firmeza como el cristal de roca. Ojalá aprendan algo, diputados diputados y senadores serviles que lamentablemente como dijo Zapata, solo hay un camino.
Para terminar, hoy a 80 años de distancia, inicia “ ElÚltimo Trecho”, como llegué, me marcharé, sin nada. No tengo fortuna, pero tengo una riqueza incalculable: mi compañera, mis hijos, nietos, biznietos y dos más en gestación. Por eso este día titulé un libro modesto lleno de experiencias y les confieso que ahora nada más tengo el título: el último trecho. Consejas orales, anécdotas y chascarrillos escuchados a la orilla de la playa, en el café de la Bravo, en algunos puestos públicos que he ocupado. Dan sus primeros fulgores el Angelus, la oración de la tarde, que va marcando el final del día. Lo vivo pobre pero optimista con los hombres de buena voluntad que de una u otr manera en las hors difíciles por las que padecí, con ellos y con cada u no de los miembros de mi familia.
El versito:
NO LO TOMO MUY A PECHO
MI ANIMO ESTA CONTENTO
AL LELGAR A LOS OCHENTA
TRANSITO EL ULTIMO TRECHO
HAY QUE ALENTAR EL CONVOY
ASÍ COMO HACIENDO EL MUDO
ASÍ COMO LLEGUE DESNUDO
ASÍ SEGURO ME VOY.