1.- Conjurado el viejo estribillo de una quimera.
2.- La rebeldía de la juventud debe canalizarse a través de la cultura.
3.- B.C.S. tiene una firme estructura cultural. Debe fortalecerse.
4.- Personalidades políticas del frente opositor en procedimiento abierto con Pelayo y Barroso.
Por: Alfredo González González
El viernes anterior se llevó a cabo el foro “descartando a la juventud” con la temática cultural que coordinó el joven Lic. Luis Bareño Domínguez como una base para estructurar programas con una mayor participación donde la juventud del estado y del municipio se abra al campo cultural.
El acto en sí, tuvo una buena aceptación porque de entrada erradica que la institución de políticos reciclados en el sentido de que: la juventud era la esperanza de la patria y los traían portando mantas, pegando propaganda y otras minucias que en nada iban preparando al joven para empresas de mayor envergadura.
No señor, la juventud es dinámica, es sana temeridad, es audaz e inteligente, pero hay que soltarlos al campo de las batallas políticas para que demuestren lo que tienen, no nada más en oratoria, en otras disciplinas que son alternas y auxiliares de la ciencia política.
Por eso la intención de Francisco Pelayo, es responsabilizar a un elemento joven para este evento que se realizó, y buscar las formas de que el teatro de la ciudad surjan los nuevos oradores con la participación de una clasificación cronológica que permita saber de su educación y ayudarlos en una profesión que les permita la cultura universal y habrá de destacar en las ciencias sociales. Es un ejemplo nada más.
Cuando cambiaron los nombres de Seguro Popular por INSABI salieron más caras las hojas que los tamales. El primero agilizaba, administraba insumos pero la necedad mandó por un drenaje, nada más por el hecho de que había que ponerle otro nombre que resultó hasta mortal. Es aquí donde queremos establecer la diferencia de continuidad y continuismo. La primera palabra indica que se debe aprovechar todo lo bueno ya fructificado. La segunda, el continuismo acompañado de prevaricación donde se pierde el tiempo en intrigar y se guarda la mano de dar y comer. Esa es la que no es conveniente porque los vicios persisten. Entonces hay un teatro de la ciudad, hay un teatro al aire libre, hay una biblioteca, hay un archivo, hay casas de la cultura a lo largo y ancho de la entidad que se podían coordinar para engrandecer la identidad de los sudcalifornianos. Ya se tiene el museo de arte y cultura que habrá de ser admirado por propios y extraños. Esta una casa de la cultura en San Antonio, en Mulege pueblo, en Santa Rosalía, en Los Cabos, hay mucho que hacer en una acción interinstitucional que llegue a un intercambio cultural y que se lleve a los muchachos de los Cabos y La Paz, los loretanos con los muleginos, los muleginos con los comundeños, surgirán nuevas amistades y fraternidades.
Esta actitud que seguramente abrazara con buena intención de quienes salgan electos en el resto de la entidad de frentes opositores, será vista con buenos ojos. Buen trabajo de Luis Domínguez Bareño.
La frase de hoy: “Buen viento y buena mar”.
